Si bien en un principio “Coca” –como la llaman sus allegados- se mostró reticente a dar su punto de vista, finalmente hizo pública su postura favorable a la histórica luchadora por los derechos humanos.
En este sentido, afirmó: “No quiero hablar hasta tanto no se aclaren las cosas. De Hebe tengo muy buena opinión, estoy con ella siempre. Las madres de Junín y casi todas las madres del país estamos con Hebe. Seguramente que ella no estaba al tanto”.
Respecto de la situación de Sergio Schoklender, la mayor representante local de la agrupación, indicó: “Si robó, tendrá que ir preso. Es la Justicia la que tiene que ver si hizo mal o no, si robó o no”.
Por otro lado, Prieto se refirió a las voces que se hicieron sentir en los últimos días en relación a la supuesta complicidad de Bonafini con los Schoklender, y al presunto desprestigio que, a partir de este caso, envolvería a la organización por ella presidida.
En esta línea, manifestó: “De ninguna manera esto desprestigia la lucha de las madres. La Justicia tendrá que investigar, pero la lucha va por otro lado”.
Escándalo en la organización
El nuevo caso Schoklender estalló el pasado 8 de mayo, cuando el mayor de los hermanos –conocidos por asesinar a sus propios padres- dejó el puesto de apoderado de las Madres de Plaza de Mayo, supuestamente, por resultar incompatible con sus proyectos personales.
Sin embargo, otras fuentes indican que Bonafini lo echó al descubrirse un enorme bache en las finanzas de la entidad, ligado al manejo de fondos públicos para construir viviendas a través de la Fundación Sueños Compartidos.
La discusión de Bonafini con Schoklender trascendió el 25 de mayo en un escándalo que involucró, incluso, a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Los protagonistas
Sergio Schoklender trabajó en la Fundación Madres de Plaza de Mayo desde que empezaron sus salidas transitorias de la cárcel en 1995.
Desde entonces, comenzó una carrera ascendente hasta que logró convertirse en apoderado de la entidad y mano derecha de Bonafini.
Por su parte, Pablo Schoklender se sumó a los equipos de Bonafini en 2001. Quienes conocen el funcionamiento interno de la Fundación, sostienen que administraba la “caja” de la entidad. Apenas estalló el escándalo, reemplazó a su hermano, pero finalmente Bonafini decidió echarlo. Se lo investiga por un presunto giro de fondos a la empresa Antártica Argentina SA en 2009.
Para la Justicia, la firma podría haber actuado como pantalla para desviar los recursos que Madres recibía del Estado.
Oyarbide investiga a Sergio, a Pablo y a otros siete imputados por tres delitos: fraude al Estado, lavado de dinero y asociación ilícita.
El patrimonio
Según se supo extraoficialmente, Sergio Schoklender es propietario de dos aviones, un yate, una casa en Pilar y 12 lotes en José C. Paz.
Además, posee los inmuebles allanados de Alvarez Thomas y Guevara, y un entramado de empresas en las que no está claro cuál es su real participación.
Fuente: www.diariodemocracia.com
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